2 Reyes capítulo 4
La abundancia va de la mano con la provisión. Cuando Dios piensa en ti te ve como su hijo y desea lo mejor para ti. Y no importando las circunstancias siempre está ahí para sorprenderte con su amor.
En esta ocasión vamos a salir del palacio del Rey David para visitar a una mujer pobre y a un extraordinario profeta. Estaremos muy atentos al episodio de hoy. Bienvenidos !!!
De la historia del profeta Elíseo con la viuda, a quien se le había muerto su esposo y le había quedado muchas de deudas, aprendemos varias lecciones para nuestras vidas hoy:
- Los Milagros casi siempre surgen de una necesidad. El clamor de una esposa ante la muerte de su esposo, por no tener una previsión y provisión económica. ( 4:1)
- Una interpretación incorrecta nos lleva a resultados incorrectos. El temor de Dios desde la perspectiva de la esposa, no incluía las finanzas. (4:1)
- Quitar dinero prestado nos hace esclavos de los prestamistas.(4:1)
- Buscar la ayuda correcta siempre será la mejor decisión. La mujer busca la ayuda correcta ante su crítica situación (4:1)
- La mejor forma de ayudar no es haciendo el trabajo de otros, sino inspirando a los demás para que descubran sus dones. El profeta usa la sabiduría espiritual, haciendo preguntas profundas: ¿Como puedo ayudarte? Decláreme que tienes en casa. (4:2)
- La realidad económica o integral de la familia toda la familia debe saberla. La respuesta de la mujer Indica su desconocimiento del manejo de la vida administrativa de la familia. Solo sabía lo mínimo: Una vasija de aceite (4:2)
- Instrucciones sabias cambian vidas. La instrucción del profeta, es decisiva y desafiante: ve y pide vasijas prestadas. No era dinero, solo eran vasijas vacías, lo cual no implicaba ningún riesgo de deuda. (4:3)
- El trabajo en equipo es parte de los milagros asombrosos de Dios. La solución a gran parte de nuestros desafíos económicos y de cualquier naturaleza viene del trabajo en equipo como familia.”Enciérrate con tus hijos” ( 4:4)
- La bendición financiera, aún cuando sea un milagro va acompañada de un proceso. Un trabajo. “ hecha en todas las vasijas, y cuando una esté llena, ponla aparte.(4:4)
- Para experimentar un cambio de cualquier naturaleza en nuestras vidas, es necesario seguir las instrucciones y ponerlas en práctica. “ se fue la mujer y cerró la puerta encerrándose ella y sus hijos…”(4:5)
- La bendición de Dios para nosotros es proporcional a nuestra capacidad. Crece en tu capacidad y estaremos listos para la bendición y la prosperidad. (4:6)
- Una vez que veas la abundancia siga las instrucciones correctas”. Haz parte de tu prosperidad a quien te enseñó. vende el aceite, paga a tus acreedores, y tu y tus hijos vivid de lo que quede. Y haz parte de tu prosperidad a quien te instruyó 4:7)
Esta historia de hoy nos deja muchas enseñanzas necesarias para el momento que estamos viviendo hoy. Quisiera resumirlas en cuatro:
- Dios siempre honrará a sus siervos, a quienes le sirven, aún cuando hayan pasado por alto asuntos importantes en su vida. Dios siempre vendrá al auxilio de su familia.
- Dios siempre enviará a sus siervos para guiarnos cuando nuestra vida más lo necesita.
- Dios siempre usará lo menos pensado, lo mas insignificante que nosotros tenemos para provocar grandes milagros en nuestra vidas.
- Dios siempre nos bendecirá no solo en el presente, sino también en el futuro. Sus bendiciones son eternas.
Oremos: Oh Dios amado. Padre de toda bondad. Tu que nos conoces perfectamente. Tu conoces cuáles han sido nuestros errores. Nuestros descuidos. Hoy venimos a ti confiados en tu gran amor. Te entregamos nuestro corazón y nuestras necesidades. Aquí estoy como esa pequeña vasija de aceite. Insignificante. Tómala en tus manos y haz el milagro que tanto anhelo. Te alabo y te bendigo por ser el Padre de la abundancia para mi. Recibo tu abundancia. En el nombre de Jesús, amen.
Pr. Nehemias Parra
Mentor Matrimonial. Miembro de la Red Global de Mentores